A partir de grandes piezas de tilo americana, el artista Christian Verginer talla esculturas figurativas que funden el juego y el asombro de la adolescencia con la vitalidad del mundo natural. Ramas frondosas crecen como coletas, un pájaro se posa en la cremallera de una sudadera con capucha y dos niños se sientan en escaleras que conducen a las copas de los árboles y a las nubes.
Texturizadas con pequeñas gubias, las obras contrastan representaciones realistas de niños con elementos fantásticos, estos últimos de los cuales el artista tiende a pintar en un solo color como el verde vibrante, el gris pizarra o el beige.
Verginer se interesa en general por las formas en que se cruzan los seres humanos y la naturaleza, que transmite a través de un sentido de curiosidad y conexión encarnada entre ambos. Algunas esculturas fomentan estas relaciones a través de formas tridimensionales, como el pájaro fallecido que la niña pellizca entre sus dedos.
Christian Verginer
Comentarios
Publicar un comentario