¡Hola, chingones!
Antes que todo quiero ofrecer una disculpa porque anduve desaparecido en estos días de adaptación social a causa de este evento histórico que estamos viviendo todos a nivel mundial. A lo cual me he estado adaptando en mis ocupaciones de trabajo, familiares, más la atención hacia las ocupaciones que la misma situación nos está solicitando.
Mucho de lo que he aprendido en estos días es seguir creando, hoy sí debemos de ser proactivos, las cosas cambian día con día, el consumo de productos, de medios, de tiempo, se está modificando la economía, los hábitos, los pensamientos, nuestras relaciones interpersonales, todo.
Y en estos tiempos, sí, he visto comunicación y acciones de muchas marcas a nivel mundial que pretenden darnos un mensaje en tono empático, de colaboración para mantener la calma y el ánimo. Hoy hay urgencia de comunicar, también de vender, porque aunque se busque un sentido solidario hacia los que no pueden salir de casa, también surge la necesidad de seguir vendiendo para mantener la economía fluyendo, aunque ha sido complicado poder volver a la normalidad, por ende transmitir mensajes sin que se vean oportunistas.
Siguiendo con el tema, quiero compartir este compilado de mensajes, que muestran el factor en común que quiere transmitir cada marca en su propuesta, música de piano, frases de apoyo como: "viviendo en tiempos inciertos", "estamos aquí para ayudarlo" "llevar sus productos a la comodidad y seguridad de su hogar" y como cierre "¡Estamos todos juntos en esto!"
Hoy muchas empresas se han quedado sin efectivo, casi de la noche a la mañana. Necesitaban enviar un mensaje, y rápido. Les pidieron a sus equipos que lanzaran algo juntos. Como no pueden filmar un anuncio nuevo debido al distanciamiento social, compilaron material de archivo antiguo y encontraron la pista de piano libre de regalías más inofensiva que pudieron encontrar. Esto, combinado con una década de tendencias de marketing dictadas por grupos focales y diseño por comité, lanzó un tsunami de anuncios derivados y cliché, todos dentro de una semana uno del otro. No es una conspiración, sino quizás una señal de que es hora de crear algo nuevo.
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